Consejos para decorar la mejor mesa de dulces en tu celebración de primera comunión

Para padres, abuelos, tíos y todo familiar cercano, el primer gran paso en la vida espiritual de los integrantes más pequeños de la familia es ocasión de júbilo y fiesta en grande. Se trata de la Primera Comunión, el primer paso consciente que niños y niñas dan en la fe, además de ser la primera vez que la atención de una reunión familiar o evento social se centra en ellos. 

Por todo esto, es normal que busquemos organizar un festejo inolvidable, digno del enorme afecto que sentimos por el o los homenajeados. Además, llevar a cabo una reunión o fiesta después de celebrar la primera Eucaristía, es una tradición que, probablemente, hemos heredado de generación en generación, al haber sido festejados de la misma manera cuando quienes ahora somos padres, fuimos los pequeños primeros comulgantes.

A la hora de propiciar un buen ambiente para celebrar, todo es importante: Decidir si habrá banquete o sólo un ambigú, si recibiremos a los invitados en casa o en un salón de eventos, si celebraremos al aire libre o dentro del recinto, qué música amenizará,  el banquete, la lista de invitados, la decoración, los colores… Bueno, la lista puede ser tan larga o tan corta, como lo sean las posibilidades, prioridades y el esmero de quienes organizan el evento. 

De entre todos los elementos que acabamos de describir, sobresale uno de los más significativos, y que suele ser el favorito de los niños y sus pequeños invitados: Los postres. Se trata de la parte dulce de la fiesta, que por obvias razones hace las delicias de quienes acompañan al nuevo miembro de la iglesia en su día especial. Ya sea con el tradicional pastel, las galletas o chocolates que se entregan como recuerdos, y recientemente la instalación de una mesa de postres, el toque dulce no puede faltar.

Una de las maneras más prácticas de servir y distribuir estas dulzuras, es instalando una mesa dulce, que además de ayudarte a consentir a los amigos y seres queridos de la familia que degustarán el buffet de postres, es útil como spot para inmortalizar el momento, capturando ahí las fotografías de la fiesta de Primera Comunión.

¿Suena complicado? Créenos, no lo es. Todo depende de la decoración. Que tu mesa de dulces sea un encanto que todos querrán igualar en sus celebraciones, es mucho más sencillo de lo que piensas; sólo guíate con tu gusto, originalidad y toque personal. 

Primero: Identifica tu estilo o temática de la fiesta. ¿Tendrás un ambiente rústico, floral, desértico, o darás gusto al pequeño o pequeña festejados adornando la fiesta con sus personajes favoritos? Cualquiera que sea tu caso, trasládalos a la mesa dulce. Cajas de madera, tarros de cristal, porta velas, bolsas de papel impresas, naturaleza muerta, cactáceas diminutas… Bueno, tu imaginación es el límite. De acuerdo con el estilo o temática de la fiesta, existen miles de elementos que pueden ayudarte a adornar la mesa en la que reposarán los deliciosos bocadillos dulces. 

Luego: Organiza. ¿Tienes una estimación de la cantidad de personas que acudirán a tu evento? Busca que el montaje de la mesa dulce abastezca a la mayoría (de preferencia a todos) de los invitados, para que su deleite no solo se visual. Además, estoy ayudará a que la mesa dulce se vea bien surtida y más lucidora en fotografías.

Finalmente: Disfruta. Sabemos que organizar un festejo puede convertirse en un caos. ¡Que no te gane el estrés! Recuerda que la Primera Comunión ocurre solo una vez, y merece la pena que formes parte activa de la fiesta. Disfruta los deliciosos dulces y postrecillos junto con el festejado y en el ambiente que creaste para la ocasión.

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