5 Consejos para disminuir la ansiedad infantil
La importancia de la salud mental es un tema que cobra cada vez más relevancia y qué, sin duda, nos incumbe a cada uno de nosotros tanto de manera personal como colectiva. Se dice que la búsqueda del bienestar comienza en la mente, sin embargo, para muchas personas resulta difícil llevar a la práctica la búsqueda de una mente sana en un cuerpo sano.
Buscar la salud integral propia es esencial, pero cuando se tienen hijos o niños pequeños a cargo, la salud mental cobra una importancia especial, pues es precisamente durante la infancia cuando ésta se define.
Los trastornos mentales que afectan el desempeño social, laboral y estudiantil de las personas se han hecho notorios con mayor frecuencia durante los últimos años, sin distinguir género, edad o condición social para manifestarse, especialmente derivados del contexto de confinamiento, contagios y pérdidas de familiares y amigos a consecuencia del COVID-19.
Uno de los que mayor alarma ha generado es la ansiedad infantil, porque al presentarse afecta el modo de vida habitual de los más pequeños de casa, en muchos casos impidiéndoles desenvolverse de manera sana en su entorno.
Aunque es normal que un diagnóstico de esta naturaleza despierte miedo, dudas e incertidumbre en los adultos responsables de cuidar y criar a los niños que padecen ansiedad infantil, existen diversas acciones que pueden emprender en la búsqueda de disminuir los efectos individuales y colaterales que puede causar la ansiedad a esta temprana edad, por ejemplo:
1. Entender y adaptarse a la nueva normalidad: ¿Recuerdas ser niño y que alguien te dijera pronto, ya casi, en un momento, y pensar que ese momento podía ser literalmente en un minuto? Pues bien, el último año fuimos testigos de un cambio de estilo de vida histórico, y para el cual no estábamos preparados. Puede ser que como adultos nos parezca un poco más fácil la adaptación al nuevo estilo de vida, sin embargo, para un niño, decir que pronto volveremos a la normalidad, puede significar más cosas negativas que positivas. Las herramientas correctas para sobrellevar el encierro con niños pequeños, lejos de decirles que pronto todo será igual, es hacerlos sentir cómodos en las nuevas y diferentes formas de llevar la vida. No asegurar en qué momento puede o no terminar la contingencia, ayuda mucho para que el niño acepte que debe ajustarse a su realidad y esperar pacientemente.
2. Promover el cuidado personal y sanitario: Enseñar a un niño a cuidar su cuerpo, es enseñarle a amarse. El cuidado y el aseo personal son cosas básicas en la vida de cualquier ser humano, sin embargo, en tiempos de pandemia, promover el cuidado personal resulta obligatorio, aún más si se trata de niños pequeños.Una buena manera de promover estos cuidados es apoyándose en actividades creativas, como la obtención de recompensas, canciones y juegos dinámicos.
3. Diseñar una rutina diaria: Como en la vida cotidiana de antes, la rutina debe de continuar. Esto no significa que la rutina deba ser la misma, sino que puede modificarse y ser igualmente divertida y práctica para ellos. Las rutinas, con frecuencia, satisfacen necesidades psicológicas básicas como lo son la comodidad, estabilidad y el sentido de seguridad que se produce al realizar cotidianamente las mismas acciones. Al establecer una rutina en el encierro total, es importante tomar en cuenta que debe ser llevada a cabo con disciplina y dedicación, pero también con flexibilidad para omitir o añadir algunas cosas de vez en cuando, pensando en no afectar la comodidad del pequeño. Además, otra ventaja de las rutinas de cuarentena es el incremento de la unión y la comunicación familiar.
4. Fomentar al círculo social de una manera distinta: Es normal que tu pequeño se sienta triste, aburrido o desanimado al no poder convivir de manera normal con sus amigos, pero esto no quiere decir que deba dejar de fomentar la comunicación con cada uno de ellos aún en la distancia. Al igual que las clases en línea, si con tu ayuda utiliza la tecnología a su favor, encontrarán que existen distintas alternativas que pueden ayudar al niño a convivir y jugar con sus amigos. El verdadero reto es aprender a adaptarse a estas nuevas formas de juego y convivencia. Es verdad que estas prácticas no satisfacen el contacto humano que si bien, es sumamente necesario, pero sí le dará un nuevo aire y un pequeño escape de su rutina de encierro.
5. Enseñarle a mantener la calma: Los niños aprenden con el ejemplo. Por eso, para ayudar a disminuir los niveles de estrés y ansiedad de un niño, es importante que les mostremos ejemplos desde la calma y la paciencia. Hacerle sentir que sus sentimientos son igualmente válidos y respetados, sin importar en qué momento surjan, puede ser de gran ayuda para controlar la ansiedad de los pequeños en tiempos difíciles. La clave para mantener la calma en cualquier situación es mostrar una correcta regulación de emociones, practicar la comunicación y fomentar el lenguaje afectivo.
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